Cuidar el entorno como asignatura

Alumnos del colegio Sagrado Corazón-Corazonistas de Haro celebraron el Viernes Solidario, una iniciativa ya tradicional a la que este año, además de la tradicional paella, se han sumado diferentes actividades específicas sobre el cuidado del entorno, la sostenibilidad del planeta y la necesidad de ser solidarios. Para explicar la necesidad de dedicar una jornada a esta causa, a primera hora se produjo la lectura de un manifiesto con la presencia de alumnos de todas las etapas del colegio.

Posteriormente, dependiendo de los cursos, se llevaron a cabo diferentes actividades. Por un lado, los alumnos de Primaria realizaron una marcha-recogida en la que, divididos en grupos de cinco y provistos de guantes y bolsas, limpiaron el paraje jarrero de Fuente El Moro.

Por otro lado, los alumnos de Secundaria acudieron al enclave de Fuente La Torre de Anguciana, donde realizaron una plantación de diferentes especies. Ambas actividades estaban enmarcadas en una iniciativa que se prolongó durante toda la semana.

«Tanto la paella como la limpieza de caminos y recogida de basuras son actividades que se llevan realizando varios años –explicaba la profesora Isabel Olmos–. En esta ocasión, hemos decidido que sería una buena idea terminar las jornadas solidarias, celebradas durante esta semana, con estos dos actos». Además, reconocía que, al hacerlo en un día lectivo, «garantizábamos la participación de prácticamente todo el alumnado del centro en ambas iniciativas. Y si a la recogida de basura añadíamos la plantada de árboles, era un tres por uno, ya que 'sembrábamos', y no solo en sentido figurado».

Y de siembras y de miradas han ido este año las jornadas. Viojardín, la empresa de diseño paisajístico de Haro, ha donado los árboles y ha proporcionado las herramientas necesarias para llevar a cabo el plantado.

También desde el departamento de pastoral impulsan esta iniciativa, con la que destacan la importancia de la naturaleza en la formación de los futuros ciudadanos. «Desde hace unos años, intentamos hacer un ejercicio de reflexión y solidaridad con el mundo en el que vivimos –explicó Rubén Ochoa–. Así, se decidió como colofón a estas jornadas juntar por primera vez la solidaridad de la paella con la recogida de residuos y la plantación simbólica. Una jornada ideal para poder poner en práctica ese entrenamiento de la mirada realizado en el aula los días previos a través de un espíritu de celebración en comunidad».

La jornada finalizó con una paella solidaria con un coste de tres euros de donativo. Los fondos recaudados en la Semana Solidaria irán destinados a los proyectos que la Fundación Corazonista tiene para este año.

• Temas
• Enseñanza primaria
• Haro
• Sostenibilidad
• Educación Secundaria